Salimos cojidos de la mano. Que vergüenza.. Todos nos miran y no puedo evitar ruborizarme.
-Tranquila...-me susurra Peeta.
-¿Tanto se me nota?
-No, lo que pasa es que tu mano tiembla mucho.
Nos sentamos y comemos. No surgen palabras de lo nuestro. Mucho mejor, menos explicaciones.
-¿Como ha ido el dia?-pregunta Haymich.
-Pues bastante bien la verdad-dice Peeta mirandome a mí. Yo le sonrio.
-Ya lo veo...-dice Haymich mientras mira indiferente. Este hombre podria mostrar mas cariño con nosotros dos. Vamos a morir, ¿y que? nos queremos. Me entra mucha rabia y cojo el cuchillo fuertemente.
-Yo me voy ya a la cama.-he sido muy maleducada pero me da igual. A todos les damos igual. Uffff... Me pongo mala de verlos con sus miradas indiferentes y su vida completamente perfecta.
Peeta me coge del el brazo para que me gire. Me quedo enfrente de él. Con un silencio de varios segundos. Nos miramos el uno al otro. Al final acabamos en una pared. Me besa intensamente, como si no hubiera un mañana, como si no hubiesen juegos. Es una sensación muy agradable. Me coge de la mano y me sube a algun sitio. Es una preciosa terraza con vistas al Capitolio. Es precioso, hay tantas luces...
-Sé que tu conseguirás, tengo esa intuicion. Eres más fuerte y tienes más valor. Y no quiero perderte ahora que te tengo a mi lado, así que no mueras por mí, por que...-me interrumpe con un apasionado beso en los labios.
Me molesta que me interrumpa pero no quiero parar de besarle. Bajamos por las escaleras idós por aquella situación en la que estabamos. Acabamos en mi habitación abrazados.
-Peeta...
-Dime amor.-dice dulcemente.
-Te amo.-y le doy un dulce beso en los labios.
-Yo tambien te amo. Merece la pena ser elegido en la cosecha para que tu estes aqui matandome de amor. Eres mi vida, Katniss.
¿Como puede haber una persona tan especial en el mundo? Me hace sentir realmente especial. No puedo dejar de besarle, y no quiero. Estoy muy agusto a su lado, no quiero desaparecer de su lado :)
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